Tal vez se trate sólo de eso, de una nueva leyenda urbana; pero de no ser así, nos encontraríamos ante un suceso escalofriantemente desconcertante que nos llevaría, una vez más, a la terrible conclusión de que no existen límites ni fronteras para el horror. Un horror que se adapta camaleónicamente a los tiempos y se vale de todos sus eventos para manifestarse ante nosotros.
Son muchos los que cuentan haber entrado al sitio web «www.blindmaiden.com» (blind maiden significa «doncella ciega»). Ahora bien, dado que el mito se ha extendido por internet, existen muchas páginas falsas. El servidor original de blindmaiden.com se dice que está alojado en los Países Bajos. Si das con la página correcta descubrirás que, si pretendes acceder a ella, por más que lo intentes tu buscador no te lo permitirá, ya que para hacerlo deberás cumplir tres condiciones:
Encontrarte completamente solo, hacerlo exactamente a la medianoche de un día sin luna y tener apagadas todas las luces de tu casa.
Una vez dentro, y gracias a un impactante viaje por las imágenes que la página ofrece, sin necesidad de que nadie te explique nada comprenderás que como dice el eslogan de presentación de la página, estarás ante «una experiencia real de horror absoluto». Tendrás que emplear tus cincos sentidos y poner especial cuidado en no dar clic, ni por error, al botón de aceptar en participar activamente en la experiencia. Si así lo hicieses sería tu fin, y quedarías transformado en una imagen más del amplio archivo de incautos que, antes que ti, osaron, tal vez incrédulos, tal vez curiosos, a probar esta experiencia.
Pero ¿qué es lo que se supone que ocurre una vez que haces clic sobre ese botón? Para tu sorpresa y horror, observarás en tu pantalla cómo una siniestra silueta se pasea por tu casa. Querrás despertar de lo que desearás que sea una pesadilla cuando veas al espectro acercarse y entrar a la misma habitación en la que te encuentras. Verás tu reflejo en el monitor, tu espalda; entonces sentirás su presencia detrás de ti. Te girarás sin poder soportarlo más y… lo último que verás antes de morir, será el rostro de la Doncella Ciega, quien, despiadadamente, te arrancará los ojos.
Como he dicho al principio, a mí no me consta que sea verdad, y sinceramente no pienso comprobarlo. Lo reconozco, me da mucho miedo; pero les paso el reto a ustedes. ¿Te atreves a comprobarlo? ¿Se trata de una leyenda, un montaje o una terrible realidad?
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